
Si tienes una biblioteca moderna cerca de ti haz el favor de visitarla, no pierdas la oportunidad porque no sabes la suerte tienes, yo tengo que pedirle a mi Cari o Churri (v. Pyjamarama by Wally Week) que me saque las cosas (de la biblioteca, ya hablaremos de sexo otro día) porque yo no tengo.
Gracias a la magia de una de estas bibliotecas en las que se pueden sacar películas, comics, discos, etecé, etecé, he leído este cómic del archiconocido Frank Miller.
Lo recomiendo, pero no me ha cautivado. Me parece que este señor tiene una emoción en el cuerpo que no puede con ella, en cada viñeta con texto tiene que dejar señas de solemnidad y de importancia y, a mi por lo menos, me hace reirme en muchas ocasiones.
Eso es lo malo, pero también le pasa en Sin City. Lo bueno y lo que hace a esta "novela gráfica" (vaya eufemismo) recomendable es que funciona. La historia engancha y la forma de contarla también, a pesar de los momentos de emoción descontrolada del Sr. Miller. Y sobre todo funciona porque el tal Sr. Miller sabe dibujar. Y para muestra, el momento en el que el joven rey Leónidas mata al lobo:
Por el amor de Dios, hacedle aprecio al dibujito porque vaya tela para meter la pedazo de novela gráfica de los cojones en el escáner. Me ha quedado guay, ¿eh?.